En España se abren demasiados negocios…

Sí, se abren demasiados pese a las trabas administrativas que hay que solventar hasta que consigues la licencia de apertura. Proyecto que tarda una barbaridad hasta que es aprobado, ayudas prometidas que nunca llegan o llegan cuando ya no las necesitas con tanta imperiosidad como cuando las solicitaste, inspecciones, altas en Seguridad Social y autónomos… Aún así el que es emprendedor lo hace a costa de su dinero o créditos que se alargan en el tiempo. Creadores de puestos de trabajo que asumen todas las cargas a las que se les obligan. Mientras tanto el gobierno gastando a manos llenas en estupideces que no nos llevan a ningún lado. Bueno sí, nos llevan y nos han llevado a la polarización entre la ciudadanía. Es vergonzoso ver cómo los sindicatos de clase o qué clase de sindicatos aprietan a los empresarios mientras ellos se pegan la vida padre. Vosotros sois muy jóvenes pero hubo un tiempo en el que abrir un negocio era fácil. Abrías y después presentabas los papeles y así es como verdaderamente se crea empleo y las pequeñas y medianas empresas funcionan desde el principio. Hoy hay que atravesar un laberinto de oficinas públicas para llegar a buen puerto, y hay gente que tira la toalla y se conforma con cualquier “ayudita” porque es más fácil que emprender… Pero claro el “malo” de esta película es siempre el empresario, o si no que se lo digan a Roig que ha dado más dinero a los afectados de la DANA que el propio gobierno de España. Y los que no han trabajado en su vida hacen sus leyes para beneficio político propio. Véase a Yolanda Díaz que se empeña en contra de la patronal en rebajar la jornada laboral. Eso es para que nuestro país tenga una producción más reducida si cabe y no es pesimismo tipo Schopenhauer, es realismo puro y duro de las sociedades actuales. En 2030 no tendrás nada y serás feliz. Todo está estudiado por los políticos de izquierdas para tener el voto cautivo y así seguir viviendo de maravilla, mientras que tú te deslomas para sacar tu negocio adelante a pesar de los pesares de éstos que dicen gobernar. Eusebio Navarro